Cerca de 24.000 personas mueren diariamente de hambre, 3.000 de malaria, 3.500 de tuberculosis, algunas centenares de dengue. Éstos son los números de las verdaderas epidemias, pandemias o como se quiera llamar a lo que rodea nuestras vidas y las hacen más inestables.
Si buscamos datos de estos desastres que asuelan este mundo injusto en que vivimos podemos quedarnos de piedra: hay poca información porque estas verdaderas epidemias no venden diarios ni inciden en la atención radiofónica de los oyentes ni en la mirada compasiva de los televidentes. No nos preocupan porque no nos afectan.
Asi comienza el articulo de Gervasio Sánchez, «Gripe, mentiras y juegos de video» y que recomiendo leer.