Hace muchos años descubrí la técnica pomodoro y siempre que la utilicé me dio muy buenos resultados. Si te interesa mejorar tu productividad ¡te invito a seguir leyendo!
¿Qué es la técnica pomodoro?
La técnica pomodoro consiste en trabajar en intervalos de 25 minutos seguidos por 5 minutos de descanso.
Es imposible estar concentrado en una tarea por demasiado tiempo. Tarde o temprano perderemos el foco, nos iremos por las ramas y dejaremos de ser productivos.
Esta técnica propone enfocarse por solamente 25 minutos en una sola tarea. El desafío parece simple y lo es: 25 minutos pasan muy rápido. Pero cuando están bien enfocados pueden ser suficientes para terminar esas tareas que parecen imposibles.
Trabajar enfocados es solo una parte de la técnica. Tan importante como los primeros 25 minutos son los 5 minutos siguientes. Estamos obligados a dejar lo que estamos haciendo y tomar un descanso. Esto incluye estirarse, ir al baño, tomar agua, salir a respirar aire libre, o lo que quieras que no tenga que ver con trabajo.
Luego de esa pausa, podrás seguir con otro intervalo de 25 minutos de trabajo enfocado.
Mi experiencia
Como te comenté al comienzo, descubrí esta técnica (es muy popular en blogs de productividad) hace tiempo y cuando me siento sobrecargado de tareas recurro a ella.
Hace un par de semanas comenzamos a usarla en Heaven con un simple video de Youtube.
Los beneficios son varios y los comentaba al comienzo, pero te quiero contar prácticamente como nos afecta.
Mayor concentración, menos distracción
Somos varios programadores en la misma sala, en grandes mesas. Estamos todo el tiempo en contacto y todos somos personas muy interesantes. Muchas veces nos colgábamos con charlas sobre deportes, política, historia o lo que fuera. Estas charlas obligaban al que estaba concentrado a hacer un esfuerzo grande por aislarse o bien.
Con la técnica pomodoro sabemos que si el reloj está corriendo en los 25 minutos, no está permitido hablar sobre algo que no sea trabajo. Ya tendremos tiempo de charlar en nuestros breaks, almuerzos o más entrado el día cuando ya hemos resuelto la mayor parte de las tareas complejas. O como diría Brian Tracy, cuando ya nos hayamos «tragado del sapo».
Descansos
Si fuera por nosotros, estaríamos sentados desde las 9 hasta las 13 que es nuestra hora de almuerzo y de 14 a 18 que es la hora de salir.
Me he encontrado muchas veces con ganas de ir al baño pero no querer cortar con lo que estoy haciendo. Espero que nunca te pase.
Otra cosa que me sucedía es que no tomaba agua. Tenemos el dispenser de agua fría en otra sala, por lo que llenar mi botellita requiere levantarme y «perder tiempo» que creía que no tenía. Ojalá nunca te pase.
Los 5 minutos de break nos «obligan» a cortar. Es el momento en que me tengo que parar de mi silla y (ya que estoy) voy al baño, cargo mi botella de agua y me estiro un poco.
Muchas veces algún compañero quiere violar los 5 minutos de break e intenta seguir trabajando pero el resto de nosotros hacemos presión para que se tome el break. Esa presión me encanta, porque al final del día es muy buena. Esos descansos nos permiten volver con la mente descansada y lista para enfocarse otro intervalo.
Al final del día esta técnica nos ayuda a que las últimas horas no sean un parto o una pérdida de tiempo. Llegamos con más energía y logramos más resultados trabajando 10 minutos menos por cada hora.
¡Tu turno!
A muchas personas, la técnica pomodoro les sirve para mantenerse enfocados porque se distraen con facilidad. A otros, los obliga a tomarse descansos porque sino son capaces de estar 8 horas sentados.
Muchos estudiantes utilizan esta técnica para estudiar. Algunas personas para limpiar su casa o para realizar alguna actividad a la que le vienen huyendo.
Como sea que la uses, estoy seguro que la experiencia vale la pena y compruebes por vos mismo si también te vas a pasar al equipo de los pomodoros 🙂